Spanish Tour

20 - 30 Minute Spanish Self-Guided Tour

Jardín Botánico VanDusen

Gira de Visitantes de 20 a 30 Minutos

Por favor, use esta gira junto con el mapa guía de visitantes

 

Bienvenido al Jardín Botánico VanDusen.  Nuestras colecciones celebran la riqueza y la variedad del reino de las plantas, y de las diversas formas en que las plantas pueden ser beneficiosas y disfrutadas por la gente. 

Antes de comenzar el recorrido, tómese el tiempo para recorrer el Centro de Visitantes, abierto en octubre, 2011.  Su diseño, inspirado por formas orgánicas, como por ejemplo una hoja de orquídea, presenta un balance armonioso entre la arquitectura y el paisaje.  Lo más importante, es que usted está parado en un edificio “verde”, que utiliza menos energía, menos agua, menos recursos naturales, produce menos residuos y crea un ambiente interior más saludable y no tóxico.

Para iniciar su gira por el jardín, proceda a la Plaza con vista al Lago Livingstone.  El último fue nombrado en honor a W. C. (Bill) Livingstone, el diputado superintendente de los parques de Vancouver en los años sesenta  y setenta, quien diseñó los lagos y las formaciones rocosas por lo cual VanDusen es conocido.  Su obra y la de Roy Forster, nuestro primer curador, combinaron una colección excepcional de plantas con un espléndido diseño de paisajes.  Previamente este jardín era un campo de golf, y se abrió formalmente como un jardín botánico en agosto de 1975.  Fue llamado en honor al señor W. J. VanDusen, un filántropo cuya contribución financiera facilitó la compra de esta tierra de su dueño, la compañía ferroviaria Canadiense, the “Canadian Pacific Railway Company”.

El Lago Livingstone es una de las varias características del agua, hecho por el hombre en el jardín.  Las excavaciones de los lagos más grandes revelaron un antiguo fondo del mar que, en el pasado, cubrió mucho de la tierra firme de la provincia de British Columbia hace unos 12,000 años.  Este jardín ahora está a 400 pies sobre el nivel del mar, el segundo punto más alto en Vancouver.  También puede visitar el Parque Queen Elizabeth que en realidad está ubicado en el punto más alto; no está muy lejos de aquí.

Siga por la rampa hacia abajo a la derecha y tome el camino paralelo al lago.  Rodeando las dos esculturas de Michael Dennis, “La Confianza”, hechas de Cedro canadiense (Thuja plicata), hay un grupo de árboles de ginkgo (Ginkgo biloba).  Estos “fósiles vivientes” fueron extensos durante la época de los dinosaurios  pero ahora están casi extinguidos en estado salvaje.  Sobreviven hoy porque fueron valorados y cultivados por los monjes budistas en China, donde sus semillas comestibles son consideradas una delicadeza.  También el ginkgo se utiliza como un medicamento a base de hierbas para mejorar la circulación y la memoria.  Además toleran bien la contaminación del medio ambiente. 

Siga el camino que pasa por los árboles de magnolias y las peonías arbustivas a la derecha y posiblemente vea tortugas que descansan en las piedras en la orilla opuesta a la izquierda, hasta una intersección.  Frente a usted se encuentra el Estanque de Ciprés con su puente flotante.  Más allá del puente hay árboles de Ciprés calvos o estanques (Taxodium distichum).  Estas coníferas de hoja caduca producen hojas delicadas como agujas de color verde lima en la primavera las cuales se ponen de color oro oxidado en el otoño, haciendo de esta una hermosa vista.  Si tiene la oportunidad de ver más de cerca, verá los crecimientos porosos en las raíces o “rodillas” que sobresalen de la tierra alrededor de sus bases troncales.  El Ciprés calvo es un árbol bien adaptado al pantano, nativo del sureste de los EE.UU. 

Doble a la izquierda y cruce el puente de piedra, que conduce a una zona que ofrece plantas del Mediterráneo.  Dominantes son los cedros verdaderos, como el Cedro del Líbano (Cedrus libani) y el Cedro azul del Atlas (Cedrus atlántica Glauca Group).  El espliego, el romero, la salvia, y el tomillo se encuentran entre las muchas plantas aromáticas que se originan en la región Mediterránea.  Sus aceites aromáticos ayudan a protegerlos de los largos veranos mediterráneos calientes mediante la reducción de la evaporación de las hojas.  Doble a la izquierda en la próxima intersección para entrar al Jardín del Hemisferio Sur.  Las plantas del hemisferio sur han evolucionado por separado de las del hemisferio norte.  Muchos de los bulbos de verano plantados aquí son originarios de Sudáfrica.  Entre los árboles que verá en esta área están:   el Haya antártica, poco escaso (Nothofagus antárctica); la Araucaria o Piñonero (Araucaria araucana) de Chile y del suroeste argentino, con sus únicas ramas puntiagudas coriáceas;  el eucalipto con sus hojas de color gris azulado de Australia; los helechos arborescentes con su base difusa y frondas de ramificación, son nativos de Australia y Tasmania; y las hayas del sur o hayas antárticas (Nothofagus dombeyi), una impresionante hoja perenne nativa de Chile.  El árbol que se destaca como el más grande de esta zona es el cedro rojo occidental (Thuja plicata), que es un sobreviviente de aquellos días cuando VanDusen era un campo de golf y es nativa de nuestra zona, no del hemisferio sur.  No es un verdadero cedro, pero se le dio este nombre común porque su madera tiene la misma resistencia a la descomposición y es una buena fuente de madera.

Para disfrutar de una vista digna de postal continúe derecho por este camino y suba las escaleras de piedra que conducen a la punta de la Península Meridional.  Aquí podrá ver los nuevos como los viejos centros de visitantes.  Vuelva al camino principal, doble a la izquierda y continúe por el puente en zigzag.  Es posible que vea algunas capas nadando por ahí o échele un vistazo a las aves acuáticas o garzas.  Quizás la Gunnera tinctoría de Chile, que está alrededor del lago, ya tenga sus hojas abiertas.

Camine hasta la pequeña colina y gire a la derecha en la Gruta de piedra hecha de conglomerado de basalto negro.  Camine a través de ese túnel al Jardín de brezo.  Allí podrá ver un ejemplo del estilo naturalista del paisaje desarrollado en Inglaterra en el siglo XVIII.  Cuenta con plantas de brezo y asociados, como el pino silvestre (Pinus sylvestris) y el abedul (Betula species).  Los pinos que rodean al jardín de brezos son algunas de las más de 110 especies de pino (Pinus species), todo nativo del hemisferio norte.  Fíjese bien en las plantas de brezo.  El brezo (Calluna species) tiene hojas similares a las escalas y florece a fines del verano; los brezales (Erica especies) tienen hojas en forma de agujas y florecen casi todo el año.  Al parecer las ovejas prefieren pastar en Calluna!

Siga cualquiera de los caminos hasta el final del refugio de piedra construido de basalto marrón y formado para parecerse a una “cabaña de Crofter”.  Cruce el puente de piedra y gire a la izquierda.  Adelante está el  Jardín perenne.  A la izquierda hay un ejemplo de un diseño más formal con un seto recortado actuando como telón de fondo para las plantas perennes agrupadas.  A la derecha, el diseño es más informal.  Más allá de la pared de roca se extiende el Gran césped, uno de los pocos recordatorios visibles de las calles de golf de los días del pre-jardín.  Muchas bodas y eventos ocurren aquí.

Vuelva al sendero por donde ha ingresado, doble a la derecha y siga por el camino más recto.  Pronto pasará por nuestro destacado paseo Laburno, el cual está radiante con cadenas de flores de oro en la primavera.  A continuación, a la derecha está la Colección patrimonial de rosas.  Continúe hasta el arco de piedra y descienda al Jardín formal de rosas.  Los bustos de bronce de David Douglas, un importante recolector de plantas de Escocia en la década de 1800 y Carlos Linneo, el botánico sueco que desarrolló el sistema binomial de nomenclatura de plantas que todavía se usa universalmente, contemplan esta área y un hermoso reloj de sol, creado por Gerhard Class.

Un catalpa de oro (Catalpa bignonoides ‘Aurea’), plantado por dignatarios el 30 de agosto de 1975, día de la inauguración del Jardín Botánico VanDusen, crece en un cruce de caminos a la derecha justo más allá del arco de metal que sale del Jardín formal de rosas.  Siga el camino más largo a la izquierda entre este árbol y el invernadero, camine más allá de los Jardines de la hierba y de la fragancia y proceda al Jardín Phyllis Bentall que rodea un charco con lirios de agua (especies Nymphaea).  Los nenúfares resistentes requieren aguas tranquilas donde crecer y, a diferencia de ciertas variedades tropicales, florecen exclusivamente durante el día cerca del mediodía y se cierran cuando el sol se pone.  Esta zona del jardín también cuenta con varias plantas, principalmente arbustos, cuya fragancia llena las noches.

Nuestra Colección de plantas carnívoras templadas se encuentra en las macetas al lado del Jardín Phyllis Bentall frente al Lago Livingstone.  Las plantas carnívoras se encuentran principalmente en los pantanos y humedales ácidos en ambientes pobres en nutrientes, pero ricos en insectos.  Ellas han desarrollado la capacidad increíble para recoger los nutrientes que le faltan mediante la captura y digestión de insectos.

Para volver al Centro de Visitantes, tome el camino hacia abajo, hacia el Lago Livingstone. Disfrute del agua refrescante de la fuente hecha con la piedra de jade de British Columbia y luego doble a la derecha y cruce el puente de madera.  Esperamos que haya disfrutado de su breve recorrido y que regrese otra vez.  Este Jardín es de 55 acres (22 hectáreas) con cambios de panoramas y plantas maravillosas con cada temporada que pasa.